Victoria y Víctor celebraron su boda en Segovia en un hermoso y cálido día de agosto, con la luz del sol iluminando su gran día. La ceremonia religiosa tuvo lugar en la Iglesia de Bernardos, un lugar lleno de historia y serenidad que aportó un toque de solemnidad a su unión.

 

Posteriormente, la celebración continuó en el Hotel Pórtico Cándido, un espacio elegante y acogedor que hizo de este día un momento inolvidable.

 

Para su look, Victoria eligió un elegante vestido de Aire Barcelona, que reflejaba su estilo sofisticado y sencillo al mismo tiempo. El maquillaje, a cargo de Natalia FuenteTaja, realzó su belleza natural, con un toque de frescura que armonizaba perfectamente con el cálido día de verano.

 

La sesión de fotos de los novios tuvo lugar en los alrededores del Alcázar de Segovia, una localización rodeada de árboles y con el majestuoso castillo como fondo. Este entorno único proporcionó la atmósfera ideal para capturar momentos espontáneos y naturales, llenos de elegancia y cercanía. Cada fotografía reflejó su amor, su complicidad y el espíritu libre de su día.

 

La fotografía natural fue clave para inmortalizar la esencia de este día tan especial, con momentos espontáneos y sinceros que perdurarán en el tiempo. Desde las risas hasta los gestos de cariño, todo quedó plasmado con un estilo cercano y auténtico.